Una de las visitas obligadas en la isla de Sao Miguel es, sin duda alguna, la ciudad de Furnas. Situado en la parte oriental de la isla, este pueblo se encuentra junto al lago del mismo nombre.
En este lugar imprescindible de Azores encontraremos una gran variedad de puntos turísticos que visitar, por lo que recomendamos dedicarle, por lo menos, un día entero. A continuación vamos a enseñaros todo lo que vimos nosotros durante nuestra visita a Furnas, en Sao Miguel.
Qué ver y hacer en Furnas
Mirador de Pico do Ferro

Si llegáis por la carretera del norte, la primera visión que tendréis del pueblo de Furnas y su laguna será desde arriba, en el mirador de Pico do Ferro. El mirador ofrece una perspectiva inigualable del Vale das Furnas y permite ver las dimensiones del lago, así como ubicar el pueblo, las fumarolas y demás elementos desde un punto de vista privilegiado. Para nosotros, un imprescindible de la visita.
✅ Puedes ver también nuestro post sobre qué hacer en Sete Cidades.
Lago de Furnas
El lago es el gran protagonista del paisaje de la zona, con permiso de las fumarolas. Es uno de los grandes lagos de la isla, junto con Sete Cidades, que en realidad son dos lagunas distintas, y la Lagoa do Fogo. En la orilla de este lago encontraremos muchos de los atractivos de Furnas.
✅ Es posible recorrer el lago en kayak con una excursión como esta.
Caldeiras de la Lagoa das Furnas
Lo primero que visitamos al llegar al lago son las fumarolas que se encuentran en la orilla. El acceso nos costó 50 céntimos por persona y, tras aparcar el coche, pudimos recorrer a pie las pasarelas junto a las fuentes de agua hirviendo. El lugar es impresionante y un testigo indiscutible de la naturaleza volcánica de la región.

Aquí, además, los restaurantes de la ciudad preparan su famoso cocido. Para ello, entierran las ollas con los ingredientes en agujeros en el suelo y los dejan ahí varias horas hasta que la comida está lista para servir. Alrededor de las 12 del mediodía, los trabajadores aparecen de nuevo para desenterrar y retirar las cacerolas.

✅ ¿Sabías que también existen fumarolas en otra isla vecina? Te lo contamos en nuestro post sobre qué hacer en Terceira.
Parque Mata José do Canto

También junto al lago, aunque en la orilla opuesta, se encuentra la entrada al parque Mata José do Canto. En este bonito jardín se sitúa la capilla de Nossa Senhora das Vitorias. Esta bonita construcción proporciona una de las imágenes más fotografiadas del lago.

En este recinto podemos encontrar también una plantación de helechos, un paseo de camelios, una enorme secuoya y una bonita cascada, el Salto do Rosal.

Junto a la cascada, la vegetación es tan exuberante que da la impresión de estar en un lugar remoto y alejado de la civilización. Cuando nosotros fuimos, el precio era de 3 euros por persona y el recinto estaba abierto de las 10 a las 18 horas.
Caldeiras en el pueblo de Furnas

Dejando atrás el lago y sus encantos, el propio pueblo de Furnas también cuenta con unas “caldeiras” o fumarolas que bien merecen una visita. En este lugar el agua avanza por riachuelos de agua caliente que van dejando nubes de vapor a su paso.
Parque Terra Nostra

Furnas es también conocida por sus balnearios y fuentes termales aptas para el baño. Nosotros optamos por visitar el parque Terra Nostra, pues ofrece la posibilidad de pasear por el recinto y tomar un baño en sus aguas ferruginosas. En marzo de 2018, la entrada costaba 8 euros y el recinto cerraba a las 18 horas.

Este bonito jardín botánico cuenta con diversos recorridos por multitud de plantaciones distintas, además de pequeñas grutas, estanques con aguas burbujeantes, figuras topiarias, riachuelos con peces, patos y gansos, avenidas de árboles y bosques de bambú…

La estrella del recinto es, sin duda, el enorme estanque que permite a los visitantes disfrutar de un baño relajante en aguas de color rojizo. El lugar cuenta con cambiadores, aunque cuando fuimos nosotros no existían taquillas para guardar la ropa, por lo que la dejamos en uno de los bancos que rodeaban el estanque.

El baño en el estanque es una experiencia imprescindible del parque. La aguas calentitas son muy agradables, aunque el color no sea demasiado tentador… Podéis consultar más información en su página web.

Otro de los lugares muy populares para tomar un buen baño termal es en Poça da Dona Beija. Son varias pozas de agua caliente y ferruginosa y es muy popular entre los visitantes.
Cómo llegar a Furnas

En caso de estar alojados en Ponta Delgada, nosotros recomendamos desplazarse hasta Furnas por la carretera de la costa norte. De esta forma, es posible obtener una primera vista del lago y la ciudad desde el mirador de Pico do Ferro, y así hacernos una idea no solo de la belleza, sino de las proporciones de este maravilloso lugar. Lo que hicimos nosotros fue ir por la costa norte y volver por la costa sur, haciendo así un recorrido circular.
✅ Consulta aquí nuestro post sobre qué ver Ponta Delgada.
Qué comer en Furnas
El cocido preparado en las fumarolas es el plato estrella de la región. En caso de querer degustarlo es recomendable reservar con antelación en algún restaurante, puesto que es un plato muy solicitado y puede resultar difícil encontrar mesas libres. No hagáis como nosotros, que llegamos al pueblo con toda nuestra ingenuidad y esperábamos encontrar algún lugar para comer con facilidad. Spoiler alert: nos quedamos sin cocido.
Otra de sus delicias son los bolos lêvedos, unos bollitos que se pueden degustar solos, con relleno dulce o con quejo y fiambre. A nosotros nos encantaron como tentempié o merienda.
Consejos para visitar Furnas
- Para degustar el cocido al estilo Furnas es recomendable reservar con antelación en algún restaurante.
- Para ver cómo desentierran el cocido es posible acercarse sobre las 12 del mediodía a las fumarolas junto al lago.
- En caso de tomar un baño en las aguas termales de la zona es mejor llevar ropa de baño vieja, ya que el agua puede dejar manchas y residuos en la tela.
✅ ¿Estás organizando tu ruta por la isla? Consulta aquí actividades que hacer en Sao Miguel.
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