Con la llegada del verano, todos nos lanzamos al agua para practicar actividades como el surf, la natación o el buceo. A nosotros nos encanta practicar esnórquel. Tenemos todo el equipo en casa, que hemos ido comprando durante años: aletas, traje de neopreno, capucha, máscara, tubo, guantes… Es una actividad muy bonita, pero que, si no realizamos de forma respetuosa con el entorno, puede ser perjudicial. Por eso hemos escrito este artículo sobre esnórquel y buceo responsable, para dar unos consejitos que nosotros fuimos aprendiendo sobre la marcha y que esperamos que te sean de utilidad.
El lugar en el que hemos vivido nuestra experiencia de esnórquel más fascinante es la Gran Barrera de Coral, en Australia. Imaginábamos que era bonito, pero no esperábamos encontrar semejante gama de colores. Corales de todas las tonalidades, peces llamativos nadando en todos los recovecos y aguas maravillosamente claras.
El problema fue que, del mismo modo que vivimos una experiencia increíble, también vimos de primera mano los efectos que puede generar una actividad poco cuidadosa o irresponsable. Corales rotos o arrancados, gente de pie encima de los arrecifes y un montón de actitudes que ponían en peligro ese ecosistema tan delicado. Es, seguramente, el lugar de buceo en el que hemos visto peores prácticas por parte de los turistas
Guías para practicar esnórquel y buceo responsable
Por eso, hemos querido elaborar una pequeña guía que se basa en nuestra experiencia para practicar una actividad de buceo o esnórquel responsable con el medio ambiente y los animales. Nosotros no somos perfectos y seguro que cometemos muchos errores, pero, si alguno de nuestros consejos os es útil para realizar la actividad con más garantías, habremos conseguido aportar nuestro granito de arena.
Evita ponerte de pie y apoyarte en los corales
¿Sabías que los corales son animales? En efecto, no son piedras, ni plantas, aunque lo parezcan y durante mucho tiempo se pensase que lo eran. Los corales son animales que viven en grandes colonias, formando los arrecifes que nosotros vemos. Las formaciones, aunque parezcan un solo individuo, son en realidad múltiples organismos de escasos milímetros que están interconectados entre ellos. Los corales son el resultado de muchos años y muchas generaciones de animales. Imaginaos lo que se tarda entonces en formar un arrecife…
Por eso, al poner el pie sobre ellos o usarlos para sujetarnos o impulsarnos, estamos perjudicando a una colonia de organismos que tardó años en crearse. Podemos destruir en un minuto el progreso de años. Si necesitamos apoyarnos o descansar, es mejor buscar un fondo arenoso y verificar que no hay más que arena bajo nuestros pies.
Los corales ya sufren múltiples amenazas que ponen en peligro su supervivencia: el aumento de las temperaturas y la acidificación de los océanos están provocando un blanqueamiento paulatino de los corales. Es decir: se están muriendo. Por eso es fundamental no añadir nuestra visita a la lista de actividades perjudiciales.
Plantéate usar algún dispositivo de flotación
Si eres como yo y flotas fatal, tal vez te compense utilizar un chaleco que te ayude a mantenerte en la superficie, o un churro de espuma, para no tener que usar brazos y piernas para mantener el equilibrio. Y es que a menudo nos asustamos o tenemos la sensación de que nos vamos a hundir, y por eso echamos la mano a lo primero que encontramos… Si usas chaleco (o manguitos, churro, etc.), te cansarás mucho menos y no sentirás la necesidad de agarrarte a algo o apoyarte para mantener el control.
Muchas veces no pedimos este tipo de «ayuda» porque somos buenos nadadores, o simplemente porque nos da vergüenza, cuando en realidad podemos nadar muy bien pero no ser capaces de mantenernos quietos en el agua.
Si lo que estás practicando es buceo y necesitas sumergirte, entonces necesitarás aprender a controlar la flotabilidad. En los cursos de buceo enseñan esta habilidad tan importante que nos ayuda a mantenernos en el agua justo donde queremos estar: ni más arriba, ni más abajo.
Utiliza un traje de neopreno
El neopreno también ayuda a flotar mejor, además de que regula la temperatura, por lo que te sentirás mucho más cómodo en el agua y te agobiarás menos. En ocasiones, con usar solamente el neopreno ya evitamos los problemas de flotabilidad y contribuimos a un snorkel responsable. Además, el traje de neopreno ejerce de barrera protectora para tu piel, por lo que estarás más seguro dentro del agua.
Intenta mantenerte en posición horizontal
Es mucho más sencillo flotar en posición horizontal que en vertical (y mucho menos agotador). Además, tendrás un mayor control de dónde están tus extremidades y evitarás darle patadas a algo que no está dentro de tu campo de visión, sobre todo si estás utilizando aletas para impulsarte (cosa que a mí me sucedía constantemente, porque, como ya comenté, floto fatal). Además, si estás cerca del fondo y golpeas la arena con las aletas, levantarás una nube de arena que estropeará tu visibilidad y hará que disfrutes menos de la experiencia.
Utiliza protector solar respetuoso con los corales (reef friendly)
Nosotros, directamente, nadamos con ropa que ofrece factor de protección solar, por lo que no utilizamos cremas solares durante nuestras inmersiones. Pero, si vas a nadar solamente con el bañador, seguro que querrás protegerte del sol con algún tipo de protector solar (y es que el sol también quema cuando estás en el agua).
Fíjate bien en los ingredientes y compuestos del protector a la hora de comprarlo y no te fíes solamente de la pegatina reef friendly, pues a veces no es del todo verdad. Muchas marcas se «disfrazan» de ecológicas porque está de moda y la gente tiene una preocupación creciente por el medio ambiente, pero no todo es lo que parece.
Los componentes más conocidos que dañan los corales son la oxibenzona y el octinoxato, que ya están prohibidos en algunos países porque aceleran el blanqueamiento de los corales, pero existen muchos otros, como el octocrileno o las nanopartículas minerales. Puedes consultar una lista más completa en esta página web.
En Palaos, por ejemplo, se han prohibido las cremas solares con componentes orgánicos que puedan dañar el medio marino y su uso puede acarrear multas, por lo que es fundamental informarse con antelación. Ojalá muchos otros países se sumen a la iniciativa para fomentar un snorkel y buceo responsable.
No toques los corales ni molestes a los animales marinos
Muchos de nosotros tenemos la tentación de alargar la mano cuando tenemos un animal a nuestro alcance, ya sea en el agua o en la superficie. En el caso del medio acuático, es posible que tengamos los corales al alcance de nuestros dedos, o que alguna tortuga nade por los alrededores (¡ojalá!).
Pero lo mejor para ellos, y también para nosotros, es no intentar tocarlos. Podemos lastimarlos sin querer, e incluso hacernos daño a nosotros, ya que algunos son venenosos, como las anémonas, o tienen aguijones, como las rayas. Otros, como las estrellas de mar, se mueren si los sacamos fuera del agua, aunque sea tan solo unos segundos.
No te lleves nada, excepto la basura
Seguro que, inspeccionando el fondo, encontrarás alguna concha espectacular (las de las orejas de mar son preciosas) y te entrarán deseos de llevártela. Todos hemos coleccionado conchas alguna vez, cuando éramos pequeños e íbamos a la playa o como recuerdo de un viaje lejano. Pero esta costumbre tan nuestra contribuye a dañar el medio ambiente por varias razones. La primera, es que las conchas sirven de refugio para los pequeños animales, que las usan como su hogar. Seguro que habrás visto miles de veces a los cangrejos ermitaños con sus casitas a cuestas… Si nos las llevamos, estaremos privando a estos animales de refugio y protección.
¿Sabías que los cangrejos ermitaños cambian de concha cuando les conviene? Si encuentran una que se adapte mejor a su tamaño o que sea más confortable, se acercarán a ella, la inspeccionarán con atención y, si les convence, sacarán su cuerpo con rapidez de su antigua casa para trasladarse de inmediato a la nueva.
Otro de los motivos por el que no debemos llevarnos las conchas de las playas es que estamos eliminando calcio que debería quedarse en el mar. Además, con el tiempo, las conchas se erosionan y forman parte de la arena, por lo que contribuimos a la desaparición de la playa. Puede parecer que llevarnos una sola concha no hace daño, pero si todos hacemos lo mismo… ¡Somos mucha gente llevándose conchas! En muchos lugares, como en las islas Cíes, ya está expresamente prohibido.
Lo que sí podemos hacer es recoger y retirar la basura que nos encontremos, para dejar el mar mejor de lo que lo encontramos.
No des de comer a los peces y otros animales marinos
En ocasiones, cuando realizamos actividades acuáticas en un entorno con animales, las empresas alimentan a los animales para que se acerquen a los turistas y así poder sacar la mejor foto de recuerdo. Esto lo vimos de primera mano en lugares como Porto de Galinhas, en Brasil. Esta actitud tiene numerosos efectos negativos. El primero, es que seguramente la comida que les den no es adecuada para el animal. El pan y otras comidas habituales no tienen los nutrientes necesarios, por lo que esos alimentos serán perjudiciales, ya que además evitan que se alimenten con lo que realmente necesitan.
Otro efecto negativo es que se altera el patrón de comportamiento natural de los animales. En algunas regiones, los tiburones ballena han dejado de emigrar porque tienen comida disponible todo el año debido a los turistas. Esto altera el equilibro del ecosistema y pone a los animales en peligro.
Si vamos a participar en actividades en las que veamos animales marinos (tortugas, peces, tiburones ballena), lo ideal es interferir lo menos posible en la vida del animal, mantenerse a una distancia prudencial y estar atento a cualquier muestra de molestia o incomodidad por su parte. Si somos una molestia, no debemos insistir en acercarnos y será mejor dejarlos tranquilos (por su bien y por el nuestro). Lo ideal es que nos tomen por un animal marino más, que no les molesta ni les supone una amenaza.
Conciencia a los demás sobre el buceo y esnórquel responsable
No se trata de dar la brasa a todo aquel que nos cruzamos (como estamos haciendo nosotros ahora), sino de compartir conocimiento. Mucha gente, sencillamente, no sabe que lo que hace está mal o puede tener consecuencias ambientales y para los animales. Nadie nace aprendido. Nosotros mismos hemos cometido muchísimos errores y, sin duda, los seguiremos cometiendo sin darnos cuenta. Lo más importante es mejorar poco a poco y estar abiertos a que nos enseñen.
Si estamos participando en una actividad con un grupo de personas y vemos comportamientos equivocados, podemos hablar en privado con el monitor para que recuerde al grupo las normas básicas. Si buscamos una empresa para realizar una inmersión, podemos escoger las que tengan buenas referencias e incluyan información sobre buceo y snorkel responsable en sus páginas web. Los pequeños gestos como estos pueden tener un impacto muy positivo en nuestro entorno y en nuestras acciones. Entre todos, podemos marcar la diferencia.
Te dejamos una pequeña infografía con los datos más relevantes sobre el buceo responsable. Si te resulta útil, no dudes en compartirla con tus conocidos, o pedirnos una copia para que te la enviemos.
Y tú, ¿tienes algún consejo más para practicar esnórquel y buceo responsable? ¡Puedes dejarlo en comentarios para ayudar a que más gente se una a la iniciativa!
Maravillosas fotos!
Muchas gracias 🙂